Las nuevas estrategias de las logias para atraer a los jóvenes
Este año se cumplen 300 desde la formación de la Gran Logia Unida de Inglaterra, la más antigua del mundo. No lo hace en plenitud de facultades, al menos en lo concerniente a su capacidad de convencer a nuevos adeptos.
Según los datos proporcionados por la propia logia en un reciente artículo de su publicación oficial, ‘Freemasonry Today‘, tan solo el 2% de los masones ingleses tienen menos de 30 años… A pesar de que, aseguran, en los últimos años representan la franja de edad que aporta más nuevos adeptos, con un 7,65%.
“Algunas logias parecen la sala de espera de Dios”, señalaba de manera ácida esta misma semana un masón a ‘The Independent‘.
Su pirámide poblacional es clara: aunque entren muchos jóvenes, la
mayor parte de los adeptos son personas de avanzada edad cuyas
posiciones, a medida que fallecen, no son ocupadas por las nuevas
generaciones. De ahí que, como asegura la prensa inglesa, los masones de las logias británicas hayan decidido llevar a cabo un cierto lavado de cara para convencer a más jóvenes de que se apunten a sus reuniones.
La tasa de crecimiento de la membresía de los últimos tres años en la Gran Logia de España es del 8%, una de las más altas de Europa.
“No es que esté sugiriendo que
debamos convertir nuestras reuniones en una pantomima, sino más bien que
no hace ningún daño que parezca que lo estamos pasando bien”, ha
explicado el gran maestro Peter Lowndes, segundo del Duque de
Kent en la logia inglesa, durante una reunión en el Gran Templo. Entre
otras recomendaciones que los líderes masones han realizado a sus
miembros se encuentran que sonrían y que eviten ser demasiado críticos.
Un desesperado intento de redibujar la tópica imagen de una masonería formada por gruñones varones de avanzada edad.
Y en España, ¿qué?
La situación parece ser muy diferente en nuestro país, a juzgar por lo que explica el equipo de comunicación de la Gran Logia de España a El Confidencial. “La tasa de crecimiento de la membresía de los últimos tres años es del 8%, una de las más altas de Europa”,
explican. “Somos una de las Grandes Logias con mayor tasa de masones
jóvenes del mundo y todos los años hay un encuentro del Gran Maestro con
masones jóvenes”. La cifra que maneja la organización es de2.600 miembros. Como ellos mismos reconocen, una cifra muy lejana de cualquier país donde la institución se haya desarrollado libremente”.
En Inglaterra actualmente hay 7.401 logias (casi tres veces más que masones hay en España)
y los miembros son 204.775, un número cercano a la población de una
ciudad como Móstoles. Es obvio: mientras que en Inglaterra (al igual que
ocurre en EEUU,
Escocia o Inglaterra) la masonería no solo ha estado permitida, sino que
sus miembros han ocupado algunos de los puestos más importantes de la
política (Winston Churchill lo fue, así como los reyes Eduardo VIII y Jorge IV), en España ha sido siempre vista con desconfianza, cuando no perseguida con virulencia. Durante la dictadura franquista, la masonería fue prohibida y acusada de haber jugado un rol clave en la decadencia del Imperio Español. No sería hasta el 14 de mayo de 1977 que se consagró la primera Logia española en más de 40 años.
De ahí que, como asegura la Gran
Logia de España, “el número de miembros no ha dejado de crecer desde el
retorno de la democracia a nuestro país y la Masonería Española goza de
uno de los períodos de mayor proyección internacional de su historia”.
A diferencia de las veteranas logias inglesas, la composición de las
organizaciones españolas es mucho más joven, de ahí que sus esfuerzos de
comunicación, como ellos mismos explican, tengan otros objetivos.
Si felicitamos a los nuevos miembros, en lugar de castigarlos, conseguiremos que se queden y detener nuestra caída en cifras
“Nuestra comunicación se centra en superar años de propaganda masofóbica, en explicar que la masonería es una luz tricentenaria de los principios y valores que hicieron posible el inicio
de la convivencia en España hace 40 años, que desde hace 300 somos una
institución empeñada en forjar seres humanos más libres en su
pensamientos y fraternos con sus semejantes”, explican a El
Confidencial. Parte de los objetivos de la Gran Logia Inglesa consisten
en, precisamente, despojarse de la imagen de secretismo y opacidad que
se ha asociado con los masones.
Cómo se lleva a cabo un ‘rebranding’
Los masones ingleses aprovecharán el 300 aniversario
de la logia pionera para darle una capa de barniz a su imagen y
promocionar sus obras. El último discurso del maestro Lowndes en el
Freemasons’ Hall londinense fue grabado por Sky Channel, que está
produciendo un documental sobre los masones que se emitirá el próximo año. No solo eso, sino que el coste de la membresía se ha reducido para los menores de 25 años y los más jóvenes están animado a la organización a utilizar las redes sociales como unaherramienta para darse a conocer entre las nuevas generaciones.
Otro problema acuciante que el
propio maestro Lowndes ha reconocido es el trato que los viejos adeptos
dispensan a los más jóvenes. “Todos podemos citar momentos en los que un miembro mayor de la logia ha sido poco agradable con un miembro nuevo que, quizá, ha tenido un lapsus durante el ritual”,
señalaba a sus compañeros. “No tengo ninguna duda, camaradas, de que si
animamos y felicitamos a los nuevos miembros, en lugar de castigarlos,
conseguiremos que se queden y darle la vuelta a nuestra caída en cifras
que ya está ocurriendo en algunas provincias y distritos”.
¿Qué desea un joven masón? El artículo publicado en ‘Freemasonry Today‘,
y titulado de manera muy apropiada “Masones ‘millenial’: cómo los
veinteañeros y treintañeros están cambiando el oficio” recoge los
testimonios de algunos jóvenes miembros. Uno de ellos es John,
un informático que aboga por preservar los rituales tal y como están,
pero que lamenta lo pronto que empiezan algunas reuniones (a las cuatro
de la tarde, por lo general), lo caras que resultan las cenas y la falta de formalidad en algunas logias. Para Tim, de 34 años, ser masón para un joven “es como un curso de desarrollo personal”.
“Hay muchos empollones que
disfrutarían de la masonería”, explica Richard, que además de quejarse
también del precio de lascenas, reconoce que “socializar con gente fuera
de tu grupo de edad a veces es complicado para los más jóvenes”. Como
explica la Gran Logia de España, “la masonería en estos momentos hace
frente a la paradoja de su madurez, de su éxito: ¿es necesaria en el siglo XXI allí donde su propuesta es parte integral del ideal democrático que queremos construir?” Solo el tiempo responderá la cuestión y si la masonería sigue apelando a las jóvenes generaciones por su defensa de la tolerancia y la fraternidad (o por la fascinación que produce su misterio, dirán los más cínicos) o si terminará cayendo en el olvido.
La masonería española se sacude el misterio
Se sienten más discriminados que
gays y lesbianas. Creen que la losa de la propaganda franquista sigue
pesando sobre ellos y quieren arreglarlo dándose a conocer en sociedad
“Hay muchos empollones que
disfrutarían de la masonería”, explica Richard, que además de quejarse
también del precio de lascenas, reconoce que “socializar con gente fuera
de tu grupo de edad a veces es complicado para los más jóvenes”. Como
explica la Gran Logia de España, “la masonería en estos momentos hace
frente a la paradoja de su madurez, de su éxito: ¿es necesaria en el siglo XXI allí donde su propuesta es parte integral del ideal democrático que queremos construir?” Solo el tiempo responderá la cuestión y si la masonería sigue apelando a las jóvenes generaciones por su defensa de la tolerancia y la fraternidad (o por la fascinación que produce su misterio, dirán los más cínicos) o si terminará cayendo en el olvido.
No hay comentarios:
Publicar un comentario