YAHWEH

YAHWEH

En artículos anteriores ya hemos visto cómo Yahweh avanzó de ser un dios tribal de los israelitas a un dios dominante del mundo occidental. Parte de este avance fue resultado de la evolución del cristianismo. El cristianismo puede ser visto como una extensión natural del judaísmo, pues está construido sobre las creencias hebreas.

Sin embargo, estas creencias no dieron lugar al cristianismo. La mayoría de los primeros cristianos eran Judios creyentes predominantemente en Yahvé. Esto por sí solo establecía a Yahvé como el dios dominante. Jesús mismo era solo un Judio. Jesús iba a ser el Hijo de Dios, pero esto más tarde iba a representar un problema. Con el tiempo esto se resolvió a través de la interpretación bíblica de Dios Yahveh diciendo: “Ahora que saben bien y el mal como nosotros” (Génesis 3:22), esto fue después de que Adán y Eva pecaron y “ellos” por lo tanto se refiere a Adán y Eva. El término “nosotros” se interpreta en el sentido de que Yahweh está hablando a los otros dioses que están con él. Dentro del sentido cristiano esto se supone que quiere decir que el Señor está hablando a Jesús y al Espíritu Santo.

Sin embargo, al considerar el artículo “Yahweh” tal interpretación no puede ser correcta. Recuerda que inicialmente Yahvé era un dios tribal que compartía el patrocinio de Israel con otros dioses en el panteón cananeo, encabezado por El y su consorte Asera. A pesar de que luego del exilio Yahvé era considerado el dios dominante de los israelitas, se deshechó la existencia de los otros dioses; es así como la presencia de cualquier otro dios no era caeptable para los israelitas, ya que solo Yahvé era su Dios, ellos se consideraban sus hijos, y por lo tanto no considerarían que Yahvé hablara con los dioses falsos de otras naciones.

La doctrina fundamental de que Jesús es el Hijo de Dios mediante el nacimiento de una virgen fue declarada en el siglo II. Las referencias bíblicas son Mateo 1:18 y Lucas 1:28-35.

El apóstol Lucas proporciona la descripción más precisa de este evento. Cristo mismo nunca habló de ello. De hecho, una vez Cristo parecía negar a su madre, cuando aquellos a su alrededor le dijeron que su madre y hermanos le estaban buscando, Él respondió: “¿Quién es mi madre y hermanos…Porque cualquiera que hace la voluntad de Dios, ése es mi hermano, y mi hermana, y mi madre” (Marcos 3:33-35). Aquí Cristo dijo que sólo si se hacía la voluntad de Dios estabas emparentado con él.

Esto plantea una vez más preguntas sobre el nacimiento virginal. Como se señaló Lucas es el único escritor bíblico que lo describe completamente. Mateo también lo menciona (Mateo 2:16-25). Así que este milagroso nacimiento se registra solo en los libros de Mateo y Lucas, sobre todo en Lucas.

La autoría y datación de los dos libros son fundamentales para la cuestión del nacimiento de Cristo. La mayoría de los cristianos piensan que Mateo escribió sobre le hecho bajo inspiración, pero los críticos creen que el autor usó el libro de Marcos y una sección perdida de los Rollos del Mar Muerto para completar el libro. Dada la posible datación de la escritura de estos libros uno experimenta un lapso que va desde 28 hasta 77 años después de la muerte de Cristo. También se sabe que Lucas no estaba entre los apóstoles originales, y que nunca conoció personalmente a Cristo.

Es especialmente preocupante conocer de dónde Lucas sacó su información, especialmente relacionada con el nacimiento virginal. La respuesta es que su conocimiento vino del cuento de boca en boca, como casi todo en la Biblia . Aunque una parte de su información provino de los Rollos del Mar Muerto, el boca a boca sigue siendo válido. En conclusión, la mayor parte del Nuevo Testamento fue memorizado inicialmente. Así, no es difícil ver cómo los lectores y los escépticos objetivos concluyen que el cristianismo es otro mito. Esto es así debido a la inexactitud de la memoria humana, en la que se confió para escribir uno de los momentos más importantes en la historia de la religión.