sábado, 15 de febrero de 2014

Frijoles

Deliciosa ensalada energética y para combatir anemia y colesterol - ideal en dietas durante embarazo, reductoras y para diabéticos.
 Los frijoles/porotos son fuente de carbohidratos complejos, proteína, vitaminas, minerales y fibra. Tienen un bajo contenido de grasa y, por ser un alimento de origen vegetal, no contienen colesterol. Son ideales para cuidar la alimentación de una persona con diabetes. Sus carbohidratos complejos se absorben más lentamente que los simples (azúcar, dulces, mieles, confites, etc.), por lo tanto ayudan a prevenir aumentos abruptos en los niveles sanguíneos de azúcar.
Tienen alto contenido de tiamina, riboflavina, niacina y ácido fólico. Las tres primeras son necesarias para la producción de energía. Por su parte, al ácido fólico es primordial para la formación y maduración de las células, por lo que es fundamental durante el embarazo, para prevenir defectos del tubo neural.

100 gramos de frijoles contienen aproximadamente 17 gramos de fibra. Esto es importante considerando los beneficios de la fibra para reducir los niveles de colesterol en sangre y el riesgo de enfermedades crónicas, tales como obesidad, diabetes y cáncer.

Si comer frijoles le genera problemas de gases o flatulencia, la solución es simple: antes de cocinar los frijoles remójelos en agua por una hora y elimina el líquido, ya que los componentes que generan los gases son un tipo de carbohidratos que se encuentran en la cáscara de los frijoles y se disuelven en el agua.

Sin duda, los frijoles son altamente nutritivos y saludables. No olvides incluirlos en tu dieta, ya que además de reducir el colesterol tiene pocas calorías, lo que ayuda a cuidar tu peso.
 

Ensalada energética y para combatir anemia y colesterol - ideal en dietas durante embarazo, reductoras y para diabéticos.
 

Ingredientes
3 tazas de frijoles/porotos/judías rojos
1 pimiento rojo - en cubitos
1 pimiento amarillo - en cubitos
1/2 cebolla roja - en cubitos
1 manojo pequeño de perejil - picado
2 limones en jugo
 
1 cucharada de aceite de oliva
Sal marina al gusto
1 . Comienza con el drenaje y enjuague de los frijoles ya cocidos; a continuación, echar en un recipiente o tupperware.
2 . Mezclar en los cubitos de pimientos, cebolla y en el perejil.
3 . Rocía el aceite de oliva y mezclar bien.
4 . Agregue la cantidad deseada de limón.
5 . Sal marina al gusto .

Esta receta es muy fácil de preparar. Siempre se puede sumar y restar ingredientes, depende de tu preferencia. Si es tu gusto una ensalada más rica en ingredientes y sabor, puedes agregar ajo, tomate, y arroz integral.

El Frijol/Poroto es una rica fuente de proteínas e hidratos de carbono, además de ser una buena fuente de vitamina del complejo B como son la niacina, la riboflavina, el ácido fólico y la tiamina. Igualmente proporciona hierro, cobre, zinc, fósforo, potasio, magnesio y calcio y tiene un alto contenido en fibra. También es una excelente fuente de ácidos grasos poliinsaturados.
Los frijoles son una manera barata de agregar proteínas a tu dieta. Compra granos a granel, eso te brinda un precio aún mejor por kilo. Eso es mucho más barato que comprar frijoles en lata.
Sólo porque estás viviendo con un presupuesto de arroz y frijoles no significa que sólo tienes que comer granos como el arroz y los frijoles! Hay un montón de maneras diferentes de servir frijoles, incluso en sopas, en burritos, escondidos en productos horneados, y como parte de una salsa. Los frijoles secos se pueden moler en harina. Además, el frijol mungo y las lentejas son excelentes para la germinación.

El Frijol es originario de México y su nombre en Náhuatl es ETL.
Existen múltiples variedades de Frijol que se caracterizan por su tamaño, por su forma, por el color de su semilla y por su tipo de crecimiento:
El Frijol Mungo son los granos que se cultivan para los brotes de frijol que se ven en las tiendas. Las Lentejas pueden ser utilizados de la misma manera. Los frijoles cocidos son un excelente alimento para los bebés que ya empiezan a comer alimento sólido (con caldo de frijol se puede alimentar a los bebés más pequeños).
Construye una buena variedad de frijoles en tu alacena. Los frijoles blancos tienen una gran versatilidad. Se pueden usar en lugar de leche en salsas y sopas de crema, o incluso en lugar de aceite en tortas.
Las Judías blancas son los granos utilizados para hacer frijoles horneados. Los frijoles negros son más sustanciosos en sabor, por lo que so buenísimos en hamburguesas y burritos. Los frijoles pintos son fantásticos en burritos y con arroz. Las lentejas no necesitan remojo previo, y son una forma rápida de hacer una comida, ya sea con arroz, verduras y especias, en sopas o en tacos.

Cómo cocinarlos:

Si vas a cocinar con frijoles, un poco de previsión se requiere. Los frijoles primero deben enjuagarse (del mismo modo que lo haría con cualquier vegetal) para obtener toda la suciedad. La mayoría de los métodos de cocción requieren remojar los frijoles durante 6-8 horas o durante la noche, antes de cocinarlos,  y por cada kilo de Frijol se le agrega una cucharadita de bicarbonato. A la mañana siguiente se vierte toda el agua y se colocan por 10 minutos de nuevo a remojar con pura agua y después se vacía el agua.
Después de este proceso los granos pueden ser cocinados, ya sea en una olla o una olla eléctrica durante varias horas. Si se cocina los frijoles en una olla a presión, sólo tendrás que lavar, sin el remojo previo que se requiere, esto llevará a cabo la cocción en menos de una hora. Es recomendable no agregar sal a los frijoles hasta que se terminen de cocinar, ya que tardarán en ablandarse. Sin embargo, si no te gustan de esta manera, puedes agregarle la sal marina cuando ya estén casi cocidos y dejarlos que terminen de hacerlo con la sal.
Si cocinas grandes cantidades de granos a la vez, se pueden congelar adicionales frijoles cocidos para utilizar otro día, acortando así el tiempo de cocción para la próxima comida. Si tienes un preservador de alimentos a presión, también se puede conservar tus propios granos de es manera.
RECETA DE HAMBURGUESAS CON FRIJOL NEGRO.
3 tazas de frijoles negros cocidos, molidos.
1 cucharadita de sal marina
4-5 cucharadas de aceite extra virgen de oliva
1 cebolla mediana, cortada en cubitos
1/2 cucharadita de ajo granulado, o 2 dientes de ajo
2 huevos grandes (puedes sustituir con dos cucharadas de agua si no quieres usar huevo)
1 taza de avena en grano
1 1/2 cucharadita de salsa de soya
3/4 cucharadita de pimienta de limón
1/4 cucharadita de hojuelas de pimiento rojo
Panes integrales de hamburguesa para servir
Cocina la cebolla en 3 cucharadas de aceite de oliva a fuego medio hasta que la cebolla se convierte en transparente y empiece a dorarse. Retira del fuego.
En una licuadora o procesador de alimentos, muele 2 -1/2 tazas de frijoles.
Mezcla el puré y el resto de los frijoles con cebolla, ajo, avena, huevos, salsa de soya, pimienta de limón, hojuelas de pimienta roja y sal. Forma la mezcla en 8 hamburguesas.
 Cocina en una sartén las hamburguesas a fuego medio. Utiliza apenas unas gotas de aceite de oliva para que no se sequen y peguen, hazlo un par de minutos, o si lo prefieres hornearlas  en el horno por unos 15 minutos. Sirve sobre pan de hamburguesas con tus ingredientes favoritos para hamburguesas.


No hay comentarios:

Publicar un comentario